En una parcela única de 13637 m2 encontramos dos cabañas de sillar de piedra donde no hace muchos años vivían los pasiegos con sus animales, en un entorno único que sin duda conforma el carácter y permite disfrutar de la naturaleza en todo su esplendor. San Pedro del Romeral es un valle de Cantabria con olor a mantequilla por su tradición ganadera, muy apreciado para descansar y volver a conectar con la naturaleza. Su carretera CA-632 tiene buena anchura y buen firme, se repara y se mejora constantemente para que sea una zona con buena comunicación y servicios a los pueblos cercanos más importantes, como San Pedro y Selaya.

La primera casa tiene 138 m2 en dos plantas. Tiene luz y agua de red y un muy buen y cómodo acceso directo de la carretera. Necesita invertir en ella pero sin duda resultará un refugio maravilloso. La segunda casa, también de 2 plantas, tiene 128 m2 y posibilidad de hacer un acceso directo, ya que la parcela dibuja el recorrido, solo habría que allanarlo. Esta casa, es especial por que tiene una segunda construcción anexa unida por un porche de madera y un abrevadero de piedra con un horno que fue panadero. Todo forma una zona de terraza natural donde podremos hacer barbacoas y contemplar las estrellas en verano. No es una parcela segregable, así que parece una inversión perfecta para grandes  familias que quieran tener su propio espacio o para una familia que puede alquilar la otra cabaña para rentabilizar en gasto.